Abrió sus ojos e intentó buscarse, su pelo quizás esté un poco más oscuro, pero siguen siendo los mismos bucles, los años marcaron sus gestos con surcos vividos y sufridos, su parpadear tan peculiar como si el viento soplase en su cara... como si una brisa le ganara el cuerpo, intentó buscarse y sintió que en el espejo quedó guardado el resto de su vida, sus reflejos, la sombra que espantaba el reloj de los sueños, el espejo le mostraba palabras que no pudo entender, líneas rápidas que no coincidían con su fisonomía, destellos de una anatomía muy lejana a ser la de ella...
Se buscó nuevamente por cada sitio en donde nació y murió. Se buscó en los mordizcos que noche a noche le daba a la luna para seguir sus secretos.
Se buscó en los destellos de su sombra, en los trazos de su madera, en el líquido de sus palabras.
El cristal del mundo paralelo era tan diferente a lo que había planeado que con pasos firmes casi temblorosos se acercó a ese placar construido de miradas y agarró sus alas...
De repente, dicen, que un huracán con aroma flores recorrió cada rincón del planeta, cada refugio de un país, cada cueva desde Isla Verde a Mar del Plata y viceversa...
Los que vivieron ese momento comentan, que hojas cibernéticas hechas de relámpagos marcaron un camino que regalaba magia, que irradiaba calor, que escribía risas y canciones. Todo fue inexplicable. Todo sucedió en menos de un cerrar y abrir de ojos...
Abrió sus ojos e intentó buscarse y esta vez se sintió libre, al fin había despegado...
Se buscó en los destellos de su sombra, en los trazos de su madera, en el líquido de sus palabras.
El cristal del mundo paralelo era tan diferente a lo que había planeado que con pasos firmes casi temblorosos se acercó a ese placar construido de miradas y agarró sus alas...
De repente, dicen, que un huracán con aroma flores recorrió cada rincón del planeta, cada refugio de un país, cada cueva desde Isla Verde a Mar del Plata y viceversa...
Los que vivieron ese momento comentan, que hojas cibernéticas hechas de relámpagos marcaron un camino que regalaba magia, que irradiaba calor, que escribía risas y canciones. Todo fue inexplicable. Todo sucedió en menos de un cerrar y abrir de ojos...
Abrió sus ojos e intentó buscarse y esta vez se sintió libre, al fin había despegado...